Características y cultivo de la lobelia azul Artículo Publicado el 02.08.2016 por Javi

La lobelia, lobelia azul o Lobelia erinus es una planta de pequeño porte que destaca por su profusa y colorida floración. La planta no supera los 20 cm de altura y sus tallos están densamente ramificados. El origen de la lobelia se encuentra en Sudáfrica y se trata de una planta anual que en ciertos climas puede comportarse como perenne.

Las hojas de la lobelia son alternas y glabras y tanto ellas como los tallos son de color verde. De todas formas lo más destacable es la densa floración de flores azuladas que en ocasiones ocultan el resto de la planta. Las flores son asimétricas con los pétalos de la parte superior muy pequeños y los tres de la parte inferior muy grandes. La razón de esta asimetría parece residir en facilitar la tarea a los polinizadores.

El cultivo de la lobelia azul debe realizarse a pleno sol o en sombra parcial. Además necesita un sustrato fértil y bien drenado que habremos enriquecido previamente con una buena cantidad de materia orgánica. El riego debe hacerse con regularidad, de forma moderada mientras crece y abundantemente cuando ya es adulta. Tras la floración debemos cortar las flores a medida que se vayan marchitando. Su cultivo se hace por semillas y la primera floración aparece ya a los cuatro meses de la siembra. Florece desde la primavera hasta el otoño e incluso en invierno si éste es suave o cálido.

Los usos más frecuentes para esta planta son las rocallas, macetas y sobre todo las cestas colgantes. Es una planta perfecta, por sus características de color y tamaño, para combinar con otras ya sea en macetas u otras disposiciones. En origen se trata de una planta venenosa por lo que hay que tener cuidado con mascotas y niños.