5 jardines botánicos que no querrá perderse Artículo Publicado el 06.12.2011 por Mauricio

Les proponemos conocer 5 de los jardines botánicos más hermosos del mundo.

1- Butchart Gardens, British Columbia, Canadá

En 1888, cerca de su lugar de nacimiento, en Ontario, un antiguo comerciante de mercería, Robert Pim Butchart, comenzó la fabricación de cemento Portland. Con el cambio de siglo ya se había convertido en un pionero de gran éxito en esta creciente industria norteamericana. Atraídos por las riquezas de costa oeste de Canadá, debido a sus ricos yacimientos de piedra caliza (vital para la producción de cemento), se construyó una fábrica en la Ensenada de Tod, en la isla de Vancouver. Allí, en 1904, él y su familia establecieron su hogar.

Cada año más de 1 millón de plantas conviven allí entre unas 700 variedades, que se utilizan en los jardines para asegurar la floración ininterrumpida desde marzo hasta octubre. Cerca de un millón de personas visitan este parque por año, disfrutando no sólo de la belleza floral. Ofertas de entretenimiento y la iluminación de las plantas son los atractivos de cada verano y Navidad.

Más información: Butchartgardens.com

2- Jardín Botánico Nacional de Sudáfrica

El Jardín Botánico Nacional Kirstenbosch es aclamado como uno de los grandes jardines del mundo. Pocos pueden igualar la grandeza misma de la creación de Kirstenbosch, en las laderas orientales de Table Mountain, en Ciudad del Cabo. Kirstenbosch fue establecido en 1913 para promover, conservar y exhibir la flora extraordinariamente rica y diversa del sur de África. Y fue el primer jardín botánico en el mundo que se dedicó a la flora autóctona de un país.

Kirstenbosch muestra una amplia variedad de la vida de la flora del Cabo, así como plantas de todas las  regiones del sur del continente, tanto en exteriores como en el Conservatorio de la Sociedad de Botánica. Hay más de 7000 especies en cultivo en Kirstenbosch, incluyendo muchas especies raras y amenazadas. El jardín cubre 36 hectáreas en una finca de 528 hectáreas, que delimita con las laderas de la montaña protegida como bosques naturales, junto a una importante variedad de animales y aves. Kirstenbosch  fue declarada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad, siendo el primer jardín botánico en el mundo en ser incluidos dentro de un sitio natural de Patrimonio Mundial.

Más información: Sanbi.org

3- Jardín Botánico de Missouri

Fundado en 1859, el Jardín Botánico de Missouri es el botánico más antiguo del país, en continuo funcionamiento, y ha sido declarado Monumento Histórico Nacional. Este jardín es un centro de investigación botánica y de educación científica, así como un oasis en la ciudad de San Luis. El jardín cuenta con 79 acres de hermoso recorrido hortícola, incluyendo unos 14 acres de jardín japonés para pasear, planteo original de Enrique Shaw. Allí existe una de las mayores colecciones del mundo de orquídeas raras y en peligro de extinción.

Desde hace más de 151 años, el Jardín ha sido un oasis en la ciudad, un lugar de belleza y diversión familiar y también un importante centro para la educación, la ciencia y la conservación.

Más información: Mobot.org

4- Jardín Botánico de Curitiba, sur de Brasil

Inaugurado en 1991 hoy es uno de los lugares más visitados en Curitiba. Contiene un Jardín Francés, que se despliega como una alfombra llena de flores, justo en la entrada. Posee una construcción de estructura metálica que exhibe especies botánicas y en la que la vegetación autóctona se mezcla entre los senderos pensados para caminar.

El Jardín Botánico, dirigido por Gert Hatschbach, atrae a investigadores de todo el mundo. Ofrece lugar para exposiciones, una biblioteca y un auditorio. Detrás de la monumental estufa hay una exposición permanente de Frans Kraycberg, con 114 esculturas de este artista y ecologista contemporáneo.

5- Jardín Botánico de New Brunswick, Canadá

Con el esfuerzo y trabajo duro de muchos voluntarios, el NBBG abrió sus puertas en junio de 1993. Un contrato de acuerdo de cinco años ha sido firmado en abril de 2008 entre tres organizaciones para asegurar el buen funcionamiento y desarrollo a largo plazo del Jardín. Cada año refresca su apariencia y belleza para dar la bienvenida a los visitantes, desde el preciso momento que se pone el primer pie en el sitio. Cada planta es producida en los viveros propios y son cuidadosamente plantadas al comienzo de cada temporada. Cientos de flores de forma simétrica y un descomunal contenido de plantas que pueden ser descubiertos por los más curiosos.