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¿De qué se trata la plantación complementaria? Artículo Publicado el 03.03.2021 por Flavia

La luz del sol, el agua y una tierra de buena calidad y drenaje son fundamentales para que las plantas crezcan felices y saludables, pero, eso no es todo. A muchas de ellas les encanta la compañía de otras para lograrlo. Afortunadamente, existen plantas específicas que cuando se cultivan próximas, les brindan a sus vecinos enormes beneficios. A esto le llamamos plantación complementaria.

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La plantación complementaria se remonta hace miles y miles de año y en la actualidad los jardineros y agricultores suelen hacer uso de ella. Los indígenas que vivían en América practicaban diversas formas de plantación conjunta antes de que llegaran los europeos.

De hecho, los agricultores indígenas de América del Norte apodaron una forma clásica de cultivo mixto como “Las Tres Hermanas” en la que se plantaban frijoles, maíz y calabaza juntos. El maíz le proporcionaba un tallo a los frijoles para que estos treparan, lo que les permitía crecer hacia el sol. Por su parte, la calabaza les brindaba sombra a ambos y al crecer cerca del suelo las protegía de las malezas.

¿Cuáles son los beneficios de la plantación complementaria?

Este trío muestra como las plantas complementarias pueden apoyarse entre sí. Los beneficios de la plantación complementaria también incluyen la fijación de nutrientes importantes como el nitrógeno, el control de plagas, el apoyo de una planta a otra, la conservación del agua, etcétera. Por tanto, este método puede mejorar el rendimiento de las plantas, reducir el uso de pesticidas y traer un ecosistema equilibrado al jardín.

Ejemplos de plantas complementarias

Si quieres ofrecerles a tus plantas de tomate algunos amigos útiles, la albahaca y el eneldo son capaces de repeler moscas y mosquitos y mejorar su crecimiento y sabor. Por otro lado, la caléndula disuade a los nematodos, la borraja a los gusanos del tomate y el eneldo mejora el crecimiento y la salud.

Por otra parte, a la calabaza le encanta estar rodeada de melón y maíz como así también de capuchinas, borraja y orégano, ya que estas plantas disuaden a los escarabajos y chinches, repelen a los gusanos, mejoran el sabor y el crecimiento y las protegen de las plagas en general.


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